Ha vuelto a suceder.
Las reservas se han agotado, nos hemos quedado sin platos para más personal.
Rogamos que lo entendáis. No es exclusividad, es espacio y cubertería limitada. Estad atent_s para la próxima. Porque habrá más cenadores, visto lo visto, y tendréis que ser rápid_s.
Pero no os preocupéis, que el mundo no se acaba el viernes. El sábado igual sí, que nos vamos a rodear el Congreso. Y si todo marcha, estaremos un pasito más cerca de acabar con toda esta farsa y brindar con Möet Chandon autogestionado, horizontal y libre de explotación laboral.
nervios y algunos altercados en la cola para el cenador |
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